martes, 27 de octubre de 2015

Enésimo enfrentamiento inútil en Palestina

Era sirio, pero esta imagen impresionante sirve para ilustrar la crueldad
de muchos comportamientos humanos 

Da igual el arma que empleen. palos y piedras, como en la primera intifada, misiles de alcance y potencia bastante limitados, como en los momentos más equipados de Hamas, o cuchillos como ahora. Y da igual que empiecen los palestinos o los soldados israelíes. El primer balance -a las dos horas o al primer día- siempre arroja un mayor número de víctimas palestinas que israelíes. La capacidad de respuesta y la potencia de fuego del estado de Israel es muy superior a la de los palestinos, aunque estos puedan tener el plus momentáneo de la sorpresa o el plus permanente de la desesperación. Todos los intentos de entendimiento han quedado a medias, generando más frustraciones, o han descarrilado estrepitosamente porque los extremistas de uno y otro bando se han encargado de minar los carriles del diálogo. Y la cosa parece que va a peor. Crecen los fundamentalistas de una y otra creencia, aumentando los niveles de intransigencia a un lado y otro de la trinchera interminable. Con cierto aire de agotamiento ante la catástrofe inevitable está escrita esta reflexión:
http://www.eldiariofenix.com/?q=content/nuevo-enfrentamiento-in%C3%BAtil-en-palestina

El enlace parece que ya no sirve para nada. Aquí está el texto del artículo:

EL PLUMILLA ERRANTE

Nuevo enfrentamiento inútil en Palestina

José A. Gaciño (El Diario Fénix, 27-10-15)

Vuelve, sigue, el enfrentamiento desigual entre palestinos e israelíes. Empiece quien empiece, el balance de cualquier escaramuza –sea cuando sea el momento del balance, a las veinticuatro horas o a los tres meses– siempre arroja dos, tres, diez, cien veces más víctimas palestinas que israelíes. La diferencia se va agrandando a medida que pasan los días de pelea.
Llevan como ochenta años de conflicto, desde que los palestinos empezaron a movilizarse contra el dominio colonial británico –secuela del desmembramiento del imperio otomano en la primera guerra mundial– y, de paso, contra la inmigración judía, que se llevaba produciendo desde finales del siglo XIX, pero que, para entonces (años treinta del siglo pasado), les empezaba a parecer preocupante, sobre todo después de la británica Declaración Balfour, que contemplaba favorablemente la creación de un hogar nacional judío en Palestina. Los judíos terminaron creando su hogar nacional, tras una sucesión de acciones armadas (es decir, atentados terroristas, en el lenguaje oficial de la potencia ocupante), que forzaron la retirada de Reino Unido y desembocaron en la solución salomónica de Naciones Unidas, repartiendo el territorio a partes iguales entre poblaciones desiguales.
Los palestinos rechazaron aquel reparto y emprendieron una amarga trayectoria de fracasos y éxodo, mientras los judíos colonizadores aprovechaban la resolución de la ONU para asentarse definitivamente en una tierra cuyos antepasados habían considerado propia. Ya entonces, en 1948, aprovecharon el rechazo de los palestinos para apropiarse de más superficie de la que les correspondía. Iniciaban así el incumplimiento sistemático de todas las resoluciones de Naciones Unidas que les afectan, con la excepción de la retirada de Gaza. Su presencia en esa franja territorial fue sustituida por el cerco total, con muro de separación incluido, que ha convertido ese territorio en el campo de concentración más poblado de la historia.
Las continuas frustraciones de todos y cada uno de los intentos de acuerdo entre israelíes y palestinos, por la acción de los extremistas de uno u otro bando, han ido deteriorando la situación hasta límites desesperantes. El movimiento de resistencia palestino, de origen laico –en la línea de los nacionalismos árabes naseristas y baasistas–, ha terminado generando una dura facción fundamentalista, Hamas, que puede ser superada en cualquier momento –quizá ya lo está siendo por la actual ofensiva de los cuchillos– por alguna rama del Estado Islámico.
Y en Israel, que nació de un proyecto utópico de socialismo autogestionario considerado en su día blasfemo por los judíos religiosos (sólo el futuro mesías podría liberar Jerusalén y recuperar la tierra prometida), crece el voto de la derecha y de los partidos religiosos. Ante las revueltas de estos días, otro paso en la escalada de la barbarie: ciudadanos israelíes que rematan a personas heridas por la policía (incluido el caso del eritreo inmigrante confundido con un palestino) o que bloquean el paso de las ambulancias para que no se atienda a los heridos árabes.
Apenas representados por una autoridad palestina frágil y limitada, los palestinos luchan ahora por recuperar o mantener un territorio menor que el que les ofrecía la ONU en 1948. Y con pocas esperanzas. La solidaridad del mundo árabe y musulmán es más retórica que efectiva. Solos frente a un poderoso aparato de guerra y represión (que cuenta con el apoyo de las potencias occidentales), poco pueden con sus piedras o sus palos, con sus bombas caseras o sus misiles rudimentarios, con sus cuchillos o sus vehículos improvisados como armas de ataque.

Acalladas en uno y otro bando las voces de quienes buscan el diálogo y la paz, asistimos al enésimo enfrentamiento inútil entre quienes siguen empeñados en mantener el odio y la violencia.

viernes, 23 de octubre de 2015

Cábalas sobre la resistencia del bipartidismo

Nubes y sol en el horizonte
(Parque Nacional de Doñana, octubre de 2011)
Llevamos casi año y medio haciendo cábalas sobre la capacidad de resistencia del bipartidismo en España, ante la irrupción de una nueva fuerza política, Podemos, y la expansión de otra fuerzas, Ciudadanos, hasta ahora centrada en Cataluña. Podemos se estrenó en las elecciones europeas de mayo del año pasado con unos resultados sorprendentes para llevar sólo cinco meses de existencia. Se convirtió, además, en el favorito de las encuestas, que lo llegaron a situar en los primeros puestos de la tabla, disputándole el liderato tanto al PP como al PSOE. Los resultados reales, en las elecciones andaluzas y en las trece elecciones autonómicas de mayo, templaron las euforias de los sondeos, y en las autonómicas catalanas quedó bastante por debajo de las expectativas. En cuanto a Ciudadanos, partiendo de planteamientos más modestos, fue escalando posiciones discretamente y, en las catalanas, se convirtió en el partido con más representación en solitario. Todo eso ha disparado todo tipo de especulaciones sobre el resultado de las elecciones generales, y todo eso se explica, con cifras y porcentajes, en este artículo de hace unos días en Mundiariohttp://www.mundiario.com/articulo/a-fondo/desigual-crecimiento-emergentes-frente-bipartidismo-resiste/20151016205851047975.html

viernes, 16 de octubre de 2015

Transición permanente

Monumento a los abogados laboralistas asesinados en
su despacho de Atocha en enero de 1977

Para hablar de la transición en España, nos reunimos en la Biblioteca Municipal de Bollullos de la Mitación (Sevilla) el jueves 15 de octubre, en la inauguración  de la Tertulia los Jueves. Allí expuse un resumen de los principales hechos que hilaron aquella transición sobre la que caben todas las polémicas. Se habló en su día de transición modélica, aunque la verdad es que el número de víctimas de los terrorismos en danza macabra por aquellos días no es precisamente un modelo. Terrorismos de izquierda, de derecha y de nacionalismos de izquierda y de derecha. Nos emocionamos entonces con la recuperación de las libertades y nos lamentamos ahora porque la derecha que nos gobierna, que se ha apropiado de una Constitución de la que inicialmente receló, nos está recortando esas libertades, además de recortar los gastos sociales. Pensamos que quizá entonces se podía haber hecho algo más, que, por ejemplo, no se debió aceptar el chantaje de frenar las movilizaciones ciudadanas a cambio de que la llamada oposición democrática quedara más presentable en el banquete electoral cuyo anfitrión, el que repartía las invitaciones, venía del régimen con el que algunos querían romper y otros sólo maquillar. Al final, quedó un híbrido de reforma aparente, que ha implantado un bipartidismo forzado, ante el que bien se podría volver a hablar de ruptura o de maquillaje. El texto que leí en esa agradable tertulia está en este enlace:

https://www.facebook.com/notes/tertulia-los-jueves/la-transici%C3%B3n-espa%C3%B1ola/161955187486245 

Lo importante son los recortes

No se trata igual el déficit griego y el déficit de Rajoy.
(La isla griega de Santorini, marzo de 2011)

Dentro de las hipocresías y de las discriminaciones vergonzosas que se estilan por la Unión Europea (y el espectáculo que estamos dando con los refugiados de la guerra de Siria es bochornoso y sangrante), la farsa de los déficit públicos se nos viene repitiendo desde el principio de la crisis. Un magnífico pretexto, el de la crisis, utilizado para ir desmontando aquellas conquistas sociales de las que Europa hacía gala en otro tiempo. No se trata tanto de reducir el déficit como de imponer qué recortes deben efectuarse para reducirlo. Lo importante son los recortes (de gastos sociales, por supuesto).

http://www.eldiariofenix.com/?q=content/soberan%C3%AD-econ%C3%B3mica-limitada

miércoles, 7 de octubre de 2015

Pendientes de las elecciones generales

Patio del Museo Dalí, en Figueres (marzo de 2012)
Como en casi todas las elecciones, cada uno lee los resultados como le parecen más favorables. En las autonómicas catalanas del pasado 27 de septiembre ha vuelto a pasar. Unos resaltan que los no independentistas sobrepasaron el 50 por ciento de los votos. Los independentistas, en cambio, presumen de haber sumado, entre las dos candidaturas de ese signo, más del 50 por ciento de los escaños del Parlament, sin mencionar que las dos candidaturas han perdido dos diputados, con respecto al parlamento anterior, y que la principal de ella, Junts pel Sí, ha conseguido nueve escaños menos que los que consiguieron en 2012 (cuando los dos partidos que se integran en esa candidatura, CDC y ERC, concurrieron por separado). Por su parte, los dos principales partidos estatales (PSC, la rama catalana del PSOE, y PP) se consuelan de sus pérdidas electorales con el recurso de comparar sus resultados con las perspectivas que le dibujaban las encuestas menos favorables, única manera de convencerse de que han recuperado fuerzas, cuando en realidad han perdido diputados con respecto a los comicios anteriores (4 los socialistas y 8 los populares). Los únicos que han reconocido, con sinceridad, su fracaso han sido los de Catalunya sí que es Pot, una coalición de Podemos con Iniciativa per Catalunya y otros, que obtuvo dos diputados menos que ICV en solitario en la cámara anterior. 
Los únicos que han tenido razones para sentirse satisfechos son los flamantes 25 diputados de Ciudadanos (que casi multiplicaron por tres sus 9 diputados de antes) y los independentistas de la CUP (que multiplicaron sobradamente por tres sus 3 diputados de antes hasta alcanzar los decisivos 10 diputados de ahora, que mantienen en vilo la continuidad de Artur Mas en la presidencia de la Generalitat). 
En general, como se explica en este artículo publicado en El Diario Fénix  http://www.eldiariofenix.com/?q=content/pendientes-de-las-elecciones-generales , 
las elecciones mantienen las posiciones entre independentistas y no independentistas, y nos colocan a todos pendientes de las elecciones generales de diciembre.